La crianza de los hijos puede parecer difícil cuando los titulares en las noticias dan miedo o nuestra comunidad se ve afectada por una tragedia. Como padres, nuestro trabajo es proteger a nuestros hijos de las amenazas. Ésta es una de las razones por las que existe la frase “Mamá Osa”. Por naturaleza, somos protectores .
Preguntas
Cuando ocurre una tragedia, es posible que tengamos más preguntas que respuestas para darles a nuestros hijos, pero hay una oportunidad importante para nosotros en medio del caos, una oportunidad para hablar con nuestros hijos sobre algunas cosas difíciles que suceden en el mundo. Lo más probable es que nuestros hijos tengan preguntas sobre lo que está pasando y sentimientos que no saben cómo expresar y si somos honestos, probablemente nosotros también las tenemos.
Aquí hay cinco preguntas para hacerse en medio de una tragedia.
1. ¿En quién confiamos?
Confiamos en Dios. Él está en su trono y sin importar lo que suceda a nuestro alrededor ponemos nuestra confianza en Él. Él es fiel y verdadero. A Él no le sorprende nada de lo que está sucediendo y nosotros confiamos en Él.
Pregúntale a tus hijos: “¿En quién confiamos ?” Hebreos 13:8 “Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por los siglos”. No importa lo que suceda en los días venideros, Jesús sigue siendo el mismo
2. ¿Tienes miedo de lo que está pasando?
Es probable que al hacer esta pregunta, obtengamos una simple respuesta de: “No”. Si sucede así, está bien, déjalo pasar y no infundas miedo a tus hijos, pero si dicen algo más, continúa la conversación. Hablen sobre lo que temen, lo que escuchan y lo que creen que está sucediendo. La realidad es que no tienes todas las respuestas; pero a veces, simplemente verbalizar nuestros miedos nos da la esperanza de que éstos no son los que controlan la situación que vivimos. Juan 14:27 dice: “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”. Jesús es el dador de paz. Ayuda a tus hijos a ver esta paz en medio del temor.
3. ¿Qué podemos hacer por los afectados?
Esta es una gran oportunidad para orar. Oren por todos los involucrados en la situación. Oren por los que ayudan y por aquellos que se dirigen en dirección de los necesitados. Oren por las familias afectadas. Si tienes hijos más pequeños, es posible que no entiendan esto, pero para los mayores, este es un buen momento para hablar sobre el dolor y la esperanza que tenemos en Jesús. El Salmo 62:5 dice: “Alma mía, en Dios solamente reposa, porque de Él es mi esperanza.”
4. ¿Qué debemos hacer?
Deja que tus hijos procesen y piensen. Puede que haya cosas que puedas hacer ahora mismo y puede que haya cosas que tengas que esperar y ver. Lo que podemos hacer desde nuestro hogar es orar. Nuevamente, esta es una gran oportunidad para enseñarles a sus hijos sobre la oración y el poder de la oración. La oración es una invitación a acudir a Dios en nombre de los demás, también es una manera de posicionar nuestro corazón para confiar en el Señor. 1 Juan 5:14 dice: “Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.”. Servimos a un Dios que no solo nos ama sino que también nos escucha. Ayuda a tus hijos a saber que el Señor escucha su voz.
Haz clic aquí para descubrir 7 formas de afrontar la tragedia con los niños
5. ¿Sabías que mamá/papá __________________?
Usa tu criterio en esta conversación. Conoce a tus hijos y lo que cada uno puede manejar. Una de las mejores formas de abrir líneas de comunicación es encontrar puntos en común. Lo más probable es que tenga preguntas y sentimientos sobre lo que está sucediendo. Habla con tus hijos sobre cosas como: “¿Sabías que papá está preocupado por __________?” Puede que esto no se aplique a todos los niños, pero bajar la guardia les permitirá saber que no están solos. Podemos hacer que nuestros hijos vuelvan a la primera pregunta: ¿En quién confiamos?
“¿En quién confiamos?”
Que este sea nuestro lema durante una tragedia. Que podamos descansar y saber que Jesús es Rey y ayudemos a nuestros hijos a que dentro de unos años puedan ver que en medio de esto, mamá y papá confiaron en Jesús.
A Bobby le apasiona empoderar a los hogares de todo el país. Le encanta ayudar a los padres a asumir su responsabilidad como principales formadores de fe en sus hogares. Sirve a padres y adultos en la Iglesia Bautista Kingsland en Katy, TX. Es esposo, padre, pastor, entrenador y autor.